El pasado domingo, Diego López, recibía el cariño de sus vecinos y amigos de Paradela, donde tiene la peña que lleva su nombre. Este era un acto típico que se celebraba cada año pero que a consecuencia de la pandemia no se celebraba desde 2019.
El guardameta reunió a unas 250 personas, y se mostró muy agradecido por todo el apoyo recibido, sobre todo después de su dolorosa marcha del Espanyol.
«Hace unos días me enteré de la triste noticia de mi desvinculación del Espanyol en el que llevaba seis temporadas. En estos momentos de incertidumbre y de espera por conocer mi futuro, lo que más quiero y me aydua es sentir vuestro cariño y ánimo», afirmó el portero lucense, quien dejó clara su intención de «seguir en activo«.