El ‘Monito’ Vargas ha cerrado esta pasada temporada un gran curso en el Adana turco, y por este motivo los grandes clubes de Turquía lo han puesto en su diana. Matías Vargas ha concedido una entrevista a ESPN, donde reconoce que no sabe donde jugará la próxima temporada y explica que lo pasó muy mal en el Espanyol.
«Seguramente el mercado de pases pueda ser movido para mí, no sé si me quedaré en el Espanyol o me iré, no sé qué pasará«, reconoce el argentino, quien reconoce que lo pasó muy mal cuando no tenía minutos en el club perico, algo que le hizo necesitar incluso ayuda psicológica «cuando no me citaban en el Espanyol me costaba ver los partidos, de hecho no los veía porque sufría por no estar ahí. Empecé a perderme un montón de cosas, en Barcelona, con un grupo de amigos hermoso, me compré una casa quizá para vivir ahí el resto de mi vida. Y yo encerrado y sin disfrutar nada. Fui aprendiendo con ayuda psicológica a tomarme las cosas con más naturalidad, a dejar que fluya, a hacer mi parte y no querer hacer lo que no depende de vos».
El ‘Monito’ Vargas ha rendido a un gran nivel en Turquía, donde reconoce que fue un curso donde no se cuidó tanto, pero tenía la mente despejada, algo que considera clave para su gran rendimiento «cuando me encerraba jugaba peor que cuando más salía o trasnochaba. Para la mente del futbolista es clave. Quizá es uno de los años en que menos me he cuidado, por las comidas o porque en Turquía hay poco pescado. Quizá no he estado en mi mejor momento físico y sin embargo es uno de los años en que más he rendido«, sentencia el argentino.
El futbolista, como todos, necesita de reconocimiento, tanto como el de primera línea, titular indiscutible, como el jugador de segunda, tercera o simplemente reserva.
Técnico que no sabe eso, no rinde, no logra nada por muy buen estratega que sea y que sea un mago del análisis futbolero.
Eso es lo que nos ha matado y mandado a segunda, desde que Rubí nos abandonó y traiciono, cosas que yo no le voy a perdonar nunca, pero era más líder de grupo y supo cohesionar al equipo.
No sé si el nuevo técnico tendrá algo de lo que se necesita para formar piña con el grupo, motivarlos, tanto a titulares como a suplentes o simplemente vino a barrer y trapear el vestuario. Pronto lo sabremos.
En todo caso el ‘Monito’ Vargas ha puesto el dedo en la llaga, exactamente donde debe ser, no pide el cielo, pide respeto, que le digan por donde van las cosas, sentirse incluido y parte de un proyecto de juego, de equipo y de club.
¡Gracias Matías, alguien tenía que decirlo claro y alto!
Es un gran jugador y lo demostrara si se le apoya la mitad que a otros…