Llegó la hora de la verdad. El Espanyol volverá a jugar un partido de Primera División después de un año en el infierno de la Hypermotion. Los de Manolo González se miden al Real Valladolid en Pucela (19:00 horas, DAZN) con la intención de comenzar con buen pie su andadura en la máxima categoría del fútbol español.
Seis son las caras nuevas que presentan los nuestros, todos estarán en el Nuevo José Zorrilla, a excepción de Marash Kumbulla, su fichaje se oficializó el sábado y no se encuentra inscrito todavía en Laliga. La única baja del Espanyol es la de larga duración de Edu Expósito.
A priori es un encuentro entre rivales directos en la lucha por la salvación. Manolo González dejó claro que no hay tiempo que perder y que el equipo debe morder desde el minuto 0 de la competición. Todos los puntos son importantes en una competición donde el Espanyol quiere ser protagonista.
El equipo no estará solo, unos 500 hinchas blanquiazules estarán presentes en las gradas del estadio vallisoletano para alentar a los espanyolistas y tratar de sumar la primera victoria del curso. Arranca lo bueno, la hora de la verdad, y lo hace en Primera División, donde tiene que estar siempre el Espanyol.
Comienza una temporada en la que Chen no quiere gastar ni un euro en fichajes en una liga muy competitiva. La plantilla del año pasado ya comprobamos que era muy limitada incluso para segunda y la cantera hace lo que puede. Las incorporaciones de cedidos son todo una incognita pero huele a descartes de otros equipos y ni si quiera equipos potentes. Con este panorama, se puede ser optimista o más bien ingenuo ? Ojalá me equivoque y me trague todas mis palabras. Força Espanyol.
No me ha gustado la rajada de Manolo González contra Martín B.
Manolo hoy te estrenas en primera gracias a los goles y total compromiso de Martin en segunda.
Martin no se ha quedado porqué la directiva ha querido ninguneado con una oferta asquerosa para un tío que marca 22 goles.
Te falta mucho para llegar a l 10% de la categoría de Martin B.
No cometas el mismo error de chulería y prepotencia que cometió David Gallego cuando lo ascendieron a primera.